Hace unos días recibí una llamada de una señora que se ponía en contacto conmigo por que había oido en la Ser que necesitábamos lana y me contó que había cerrado hace unos años una tienda de lanas y tenía muchas y nos las quería donar para que siguieramos haciendo las cosas que hacemos por y para nuestra ciudad.
Hoy hemos estado en su casa a recogerlas y nos hemos encontrado con una maravillosa sorpresa, esta:
Todo esto que veis proviene de esta encantadora señora, asi que ya tenemos lana para dar guerra un rato.
Y ayer nos encontramos a esta buena señora que le encantó nuestro trabajo y quiso traernos unos cuantos ovillos de lana para que sigamos adelante
Algo debemos de hacer bien para recibir estas cosas. Gracias y mil veces gracias a ellas y a todos los que nos apoyan de una u otra manera.
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